Otras industrias han resuelto problemas similares a los que nos ocupan descubriendo cómo, de manera ágil, se pueden personalizar y ensamblar componentes estándar de modo que se puedan construir productos iguales pero distintos, mediante la integración, estandarización y automatización de sus líneas de producción, mediante el desarrollo de herramientas altamente extensibles, configurándolas de modo que puedan realizar tareas repetitivas y minimizando el riesgo y los costes en las relaciones con los clientes y proveedores. Partiendo de este punto se han construido líneas de producción para las variantes de los productos, se han generado cadenas de suministros distrubuyendo los costes y los riesgos a lo largo de diferentes suministradores especializados y relacionados entre si, habilitando de este modo la producción de una variada gama de productos capaces de satisfacer las necesidades de un amplio abanico de clientes. En resumen, industrialización.
Mi intención no es sugerir que la construcción de software es un proceso mecánico capaz de ser llevado a cabo por trabajadores no cualificados sino que, al contrario, no se debe malgastar el tiempo de los buenos desarrolladores realizando tareas automáticas y repetitivas, de modo que dichos trabajadores puedan pasar más tiempo pensando y no realizando tareas que podrían estar automatizadas. Deberíamos de ser capaces de encapsular el conocimiento en lenguajes, patrones, dsl, herramientas, frameworks, etc de modo que se puedan aplicarl de manera sistemática, automatizando de este modo el ciclo de vida del software.
No hay comentarios:
Publicar un comentario